Tanto los CFD como las acciones tienen ventajas y desventajas a la hora de operar. Estos dos productos son muy diferentes, por lo que antes de decidir cuál es el adecuado para ti, debes comprender tanto las diferencias en el debate entre CFD y acciones, como cómo están interrelacionados y relacionados entre sí.
En este artículo, analizaremos las ventajas de los CFD y las acciones, sus desventajas y las diferencias entre el trading de CFD y el trading de acciones.
CFD vs. acciones
La principal diferencia entre los CFD y las acciones es que los CFD, contratos por diferencia, son productos financieros apalancados, mientras que las acciones no lo son. Esta diferencia tiene grandes implicancias en cómo se pueden utilizar cada uno dentro de una cartera de inversiones, el conocimiento necesario para operar con ellos y el análisis fundamental y técnico que deberás realizar para gestionarlos con éxito.
Ahondemos más en cada una de estas opciones para los traders.
¿Qué son las acciones?
Las acciones son probablemente familiares para la mayoría de las personas, e incluso si no has comenzado a operar o invertir directamente, es posible que estés expuesto al trading de acciones a través de tu fondo de jubilación. Las acciones son una unidad de participación en una empresa o un ETF (fondo cotizado en bolsa); poseerlas te otorga ciertos derechos de voto y una parte de las ganancias de esa empresa.
El valor de tus acciones se deriva del valor de la empresa en una bolsa de valores. Este valor, o precio de las acciones, puede subir y bajar, y también puedes recibir pagos, conocidos como dividendos, de tus acciones.
Cuando inviertes en acciones, no tienes acceso al apalancamiento; esto significa que tus ganancias probablemente serán más modestas, pero también que tus pérdidas no pueden superar tu inversión inicial. Si inviertes £1,000 y el precio de tus acciones cae a cero, lo máximo que perderás son £1,000, pero no superarás esta cantidad.
¿Qué son los CFD?
Los CFD, o contratos por diferencia, no representan la propiedad de un activo en particular de la misma manera que las acciones. Son instrumentos financieros que permiten especular sobre el movimiento del precio de un activo o un índice. Al operar con CFD, el trader no adquiere la propiedad del activo subyacente; cualquier ganancia o pérdida se deriva del movimiento del precio actual.
Los CFD se utilizan a menudo para operaciones basadas en movimientos de precios a corto plazo o para proteger tus posiciones existentes contra pérdidas. La cobertura es posible con los CFD, ya que son un producto que te permite ir en largo o en corto (comprar o vender), según tu opinión sobre cómo se moverá el mercado.
Como mencionamos, los CFD son productos financieros apalancados. Operar con apalancamiento significa que solo se necesita un porcentaje del valor total de la operación para abrir una posición. Esto también se conoce como margen, y es calculado por una empresa para producir una tasa de margen.
Si un CFD tiene una tasa de margen del 20%, por ejemplo, abrir una posición de £1,000 requeriría un depósito de £200. El trading con apalancamiento abre la oportunidad de obtener mayores ganancias, pero también conlleva el riesgo de mayores pérdidas, ya que cualquier resultado se basa en el valor total, no solo en tu depósito de capital.
Conoce la diferencia entre el trading de CFD y el trading de acciones
Otra forma de pensar en la diferencia entre los CFD y las acciones es que el trading de acciones implica comprar una participación en la empresa, mientras que los CFD se basan en apostar por el resultado del mercado. Esta diferencia principal significa que hay muchas formas en las que el trading de acciones y el trading de CFD ofrecen opciones muy diferentes:
Apalancamiento y costo de posición: El hecho de que los CFD sean productos apalancados significa que ofrecen una barrera de entrada más baja; solo necesitas poner un margen para obtener exposición total al mercado. En comparación, las acciones requieren un mayor costo de posición; deberás pagar el valor total de las acciones por adelantado.
Riesgo: El apalancamiento amplifica todo: tanto tus ganancias potenciales como tu riesgo. Las acciones pueden llegar a valer £0, pero solo perderás el valor de tu inversión inicial. Si abres una posición en un CFD y el mercado se mueve en la dirección equivocada, tienes el riesgo de una pérdida absoluta, con todas tus posiciones de CFD cayendo a cero. Tu pérdida también podría superar tu inversión inicial, al igual que tus ganancias podrían aumentar si el mercado se mueve a tu favor.
Flexibilidad: Los CFD se consideran generalmente más flexibles que las acciones, ya que puedes apostar por el éxito o el fracaso del mercado, puedes ir en largo o en corto, y puedes compensar tus operaciones de forma relativamente rápida y con menos dinero necesario para obtener exposición total al mercado. Por esta razón, son un producto popular para traders avanzados que buscan especular sobre los movimientos del mercado intradiario, una estrategia conocida como day trading.
Horario de negociación: Los CFD se pueden operar fuera del horario de negociación tradicional del mercado, sin embargo, puede haber cargos o tarifas adicionales asociadas con el trading fuera del horario de negociación. Con los CFD, tienes la libertad de operar potencialmente las 24 horas del día, mientras que las acciones suelen estar limitadas a las horas de negociación de la bolsa local.
Mercados disponibles: Tanto los CFD como las acciones tienen amplios mercados disponibles en los que puedes comenzar a operar. Las acciones se pueden comprar y vender en mercados globales, al igual que los ETF.
Los CFD están disponibles en muchos mercados internacionales y puedes utilizar estrategias de trading de CFD para obtener exposición a materias primas, bonos, acciones, índices, divisas, pares de divisas, ETF y más.
Oportunidades de venta en corto: Si estás buscando vender en corto una posición, es probable que los CFD sean la opción correcta para ti. Las acciones no ofrecen la venta en corto en todas las plataformas, y las oportunidades para vender en corto acciones no son tan dramáticas ni tan atractivas como con los CFD.
Privilegios y dividendos: Cuando inviertes con el objetivo de recibir dividendos y privilegios como accionista, debes adquirir acciones en lugar de CFD. Los CFD nunca están vinculados a la propiedad del activo subyacente, mientras que poseer acciones pagará dividendos y, en algunos casos, te otorgará derechos de voto en la empresa.
Complejidad: Las acciones son en cierta medida un concepto abstracto, pero son un instrumento financiero probado y confiable con un sistema bastante sencillo de trading y fluctuación de valor.
Los CFD, en comparación, son mucho más complejos. También pueden fluctuar rápidamente en precio, lo que aumenta el riesgo de sufrir pérdidas rápidas. Las estrategias de gestión de riesgos como las órdenes de stop loss y las órdenes límite son útiles cuando se controla este nivel de complejidad y se protege contra pérdidas.
Diversidad: Tanto las acciones como los CFD son opciones para diversificar tu cartera, dependiendo de cómo se utilicen. Los CFD se pueden agregar a una cartera para proteger tus posiciones actuales y para obtener exposición total al mercado de un activo en el que aún no tengas posiciones abiertas.
Debido a que los CFD se operan únicamente en función del movimiento del mercado, es más probable que una cartera exclusivamente compuesta de CFDs caiga a cero absoluto. Una estrategia que combina acciones y CFDs te brindará posiciones largas y cortas, oportunidades de grandes ganancias y menos volatilidad.
¿Qué mercados de CFD están disponibles?
Los CFD están disponibles para operar en varios mercados: materias primas, energías, metales preciosos, bonos, acciones, índices y más. En VT Markets, ofrecemos CFDs en mercados de todo el mundo, incluyendo:
CFDs de acciones de EE. UU. CFDs de acciones del Reino Unido CFDs de acciones de la UE CFDs de acciones de Hong Kong
Debido a que los CFDs ofrecen operaciones fuera del horario de negociación, es posible abrir una serie de posiciones con CFDs de acciones en un mercado internacional, incluso si no se encuentra en la misma zona horaria que tú.
Ahora que sabes qué mercados de CFD están disponibles, estás listo para obtener más información sobre cómo operar con CFDs con nuestra guía detallada.
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Preguntas frecuentes
¿Es mejor operar con CFD o acciones?
Tanto las acciones como los CFDs tienen sus propias ventajas y desventajas que pueden o no adaptarse a tus objetivos y estilo de trading.
Las acciones se consideran un instrumento financiero más directo que es adecuado para tomar posiciones largas y te otorgan ciertos privilegios como accionista en una empresa o ETF.
Por otro lado, los CFDs son buenos para presentar oportunidades a corto plazo, son más fáciles de operar con exposición total al mercado y te brindan la flexibilidad para cubrir tus posiciones existentes o apostar en contra del mercado si así lo deseas.
¿Es mejor operar con CFDs que invertir?
Debido a que los CFDs requieren que operes con margen, cuesta menos inicialmente obtener el mismo nivel de exposición al valor equivalente de las acciones. Los CFDs también se pueden utilizar para compensar otras inversiones, y tanto las operaciones de CFD como las inversiones en acciones se pueden utilizar juntas para tener una cartera más diversa y protegida.
¿Los CFDs son más riesgosos que las acciones?
Debido a que los CFDs son productos financieros apalancados, amplifican tanto tus ganancias como tu margen de pérdida. Es importante tener un buen entendimiento de estos instrumentos financieros complejos y cómo funcionan antes de comenzar a operar con ellos. Como sucede con muchos productos financieros, su potencial de altas ganancias viene acompañado de un mayor riesgo potencial, y incluso pequeños movimientos en los mercados pueden amplificarse como pérdidas.
Por esta razón, las herramientas de gestión de riesgos como las órdenes de stop loss y las órdenes límite son útiles al gestionar posiciones de CFD.
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